Palma de Chontaduro Mito Fundacional Carare Narración: Aída Fernanda Alzate Cano Inspirado en la Narración de la Laguna de Tota en Ceremonia de Plantas Sagradas: Yagé, Mambe y Ámbil. “El firme timbre de las frases repercute el paso vibrante de las imágenes que se liberan en las aguas” (Antonio Ramos Rosas, De Clareiras, 1986) La Palma de Chontaduro Hace un tiempo en un lugar donde la brisa es fresca y fuerte se encontraban una Abuela y su Nieto bajo una Palma de Chontaduro. La Abuela le contaba al pequeño historias increíbles y coloridas sobre la Tierra, el Fuego, el Agua y el Aire; el nieto con sus pequeños ojos llenos de ilusión imaginaba esas Tierras con sonidos impensables, Tierras sin principio ni fin, lugares llenos de canciones y plantas. En un instante el niño se quedó perplejo, pues, un pensamiento se posó en su mente: “Si mi Abuela todo lo sabe, ¿Cómo es que otros saben tanto como ella, pero, sus Tierras no huelen igual ni cantan igual, por qué ellos no nacieron del
Esta pregunta se ha repetido una infinidad de veces durante estos días, y aunque en principio, debería encontrarme en capacidad para responderla una confusión, no tan momentánea, me invade; es igual que si me preguntaran ¿Qué es para usted la danza? Y lo único que podría hacer sería poner cara de shock profundo. Sin embargo podría ser más sencillo, por lo menos para mi, responder si la pregunta fuera ¿Cómo siento a la literatura o a la danza? Entonces así, podría hacer una suerte de cláusula cartesiana: siento, luego, comprendo, por lo tanto, existo. Si parto de este punto puedo, entonces, decir qué son la danza y la literatura se convierte en un ejercicio de introspección hacia mi yo, lo cual, acarrearía una larga y profunda búsqueda. Los sentidos son nuestra puerta a la realidad exterior a nosotros es, a través, de ellos que todo el universo que nos contiene se vuelve algo para nuestro interior; la razón podría considerarse una clase de sentido, al igual que, el tacto, el olfato
En este espacio que habitamos, en el que se intenta residir, y que se le reconoce por el nombre de Colombia, ocurren muchos, tal vez demasiados, fenómenos fuera de lo común pero, al fin y al cabo, comunes. Uno de estos fenómenos es el que me invita a hacer la presente reflexión, dicha reflexión, no pretende abarcar todas las situaciones, razones, y porqués, busca más bien, tener voz en el ruido eterno del silencio en nuestro país. El fenómeno debe ser nombrado, pero, ¿Cómo nombrarlo si parece que no existiera? ¿Podría, en realidad, considerársele como tal? Claro que desde un punto de vista menos filosófico un fenómeno es aquello que sucede por o en sujetos (o que sucede en la realidad circundante y natural), y para este particular, aún existimos varios sujetos que sentimos que algo nos sucedió, algo que se llevó ilusiones pero trajo esperanza (ese es el problema de la esperanza es en nulidad… el señor Spinoza nos diría que nos ata y nos encadena), en fin, dado que el pasado se dil
GRACIAS!!! con tus frases enalteces el ser una mujer digna,franca y resuelta a ser ella misma en sus luchas y busquedas cotidianas .
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